El Secreto de la Política Argentina
Para un tema que llena diarios y revistas y canales y radios y cafés, la política argentina es un tema sorprendentemente sencillo. Está cubierto con una capa de mística (culpa del peronismo, ponéle) y una capa de épica (culpa de los golpes, ponéle) pero si uno la mira racionalmente, es algo obvia.
Permítanme que les explique en unos pocos párrafos todo lo que necesitan saber sobre política argentina para los próximos 3 años.
- No hay partidos.
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Nadie vota a un partido. Nadie vota al PJ ni a la UCR, ni a ningún partido. Votan a frentes. Dirás "los frentes están formados por partidos" pero en realidad los partidos son fungibles, se arman y desarman, fundan y cierran cada vez que un político con una determinada cantidad de adherentes lo necesita o lo deja de necesitar.
Como no hay partidos, decir "soy peronista" o "soy radical" es una pavada. No significa nada. Si estás en política seguís a alguien, no a un partido.
Eso te explica porqué los vicepresidentes de una presidenta nominalmente peronista han sido un radical y uno de la UCD, expulsados o renunciantes de sus propios partidos, reaceptado uno luego de una expulsión de por vida, como se puede ser parte de un gobierno y precandidato de la oposición. Como no hay partidos y lo que hay es "seguimientos" entonces cambiar de lealtades es tan fácil como cambiar de bar si te cambian la marca de café.
- No hay lealtades
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Leales son los de abajo. Los de arriba no tienen lealtades porque no tienen a quién seguir. Lo que tienen son "principios", que al ser una cuestión abstracta y sujeta a revisión, son mucho más vagos y flexibles. Tienen "estilos" y "tradiciones", ponéle. Tienen esas cosas, pero no tienen nada que pueda dejarlos en evidencia después. Tienen pragmatismo.
Eso te explica por qué te puede parecer que hacen hoy lo que hace diez años denostaban como malvado, lo que pasa es que en este momento les parece mejor idea. Y no sé si eso está realmente mal. La gente que tiene un preconcepto, un esquema rígido de qué está bien y mal y lo aplica sin pensar, me parecen tontos, me parecen poco empáticos.
- Hay horizontes
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Las cosas que importan son las que van a pasar en los próximos tres años. O tres meses. O quince días. Lo que importa es lo que pasó en los últimos quince días, o tres meses, pero nunca tres años.
Esto te explica por qué podés juntar un millón de personas, "ganar" una pelea de poder (la 125, digamos), y que después no tengas ninguna relevancia. ¿Qué es de la vida de Cobos, de Buzzi, del tipo ese que no me acuerdo como se llama? Bueno, que no me acuerdo como se llama.
- Cuesta plata
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Hacer política es caro. Los únicos que pudieron construir algo que les permita ser elegidos para algo en los últimos años fueron De Narváez (que merecería ser radical, por la vaguedad de su discurso), y Macri (que merecería ser radical por lo vago). Las supuestas personas con "habilidad política", como Carrió que pretendió construir desde el discurso apocalíptico, o Binner, que pretendió construir desde la manía santafesina de elegir al tipo que está un cachito más al centro que el gobierno de turno, o Alfonsín, que pretendió construir desde tener el bigote parecido a su viejo, no tienen plata, y no van a ganar nunca una elección fuera de su base, en el caso de Binner, o nunca en absoluto, en el caso de los otros.
- Es cosa de prepotentes
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Si tenés 2, decí que te merecés 5. Si tenés 5, decí que te merecés 20. Si tenés 20, decí que te merecés la chancha y la máquina de hacer chorizos. Si nadie te empuja para atrás, te la van a dar. Y una vez que tomés impulso, cada vez pararte va a ser más difícil.
Si tenés la desgracia de que la oposición que te toca en suerte está formada por inoperantes, y el mayor interés que encontrás para pelearte es un grupo que forma parte de una industria moribunda, entonces qué hacés? ¿Qué hace alguien que busca pelea cuando nadie se le planta, excepto alfeñiques?
Se vuelve matoncito, como este gobierno. Y busca pasarle por encima de parado a los que estén cerca, porque no tiene perspectiva, entonces cualquier cosa es un golpe, cualquier cosa es horrible, cualquier cosa es épica.
Y no, no es épico, estás peleando con enanitos.
Sospecho que el primero en entender la política argentina fue Duhalde y tuvo la mala suerte de ser Duhalde, y se lo contó a los Kirchner, que tuvieron la buena suerte de no ser Duhalde. Sospecho que ninguno de los políticos que tenemos en el país y no son gobierno puede encontrarse el culo con las dos manos, una linterna y un cartel que diga "atrás tuyo". Sospecho que a pesar de las enormes defectos de este gobierno, la oposición son los que perdieron con De la Rúa. ¿Se acuerdan?
Sospecho que no estamos tan mal como dicen algunos, ni tan bien como dicen los otros, y que las cosas se van a poner un poco peor, y que Cristina se va al final de este mandato, y que va a asumir un siome, porque los matones no hacen escuela, y los enanitos se van a juntar, y van a elegir al enanito más inofensivo posible, para que no piante votos, y así nos va a ir.
Y, eso de olvidar tanto para atrás es un golazo para muchos :P
OFFTOPIC: Anda medio como el culito el plugin este de Disqus.
Algo le pasa, tu comentario está en mi dashboard pero no en el sitio. Y.... apareció. Tardó un cachito nomás.
"Es cosa de prepotentes": es lo mismo que veo yo. Gracias por ponerlo en palabras!
Ojo, a los otros les encantaría ser prepotentes, pero como para serlo tienen que ser votados, prefieren decir que ser prepotente es caca.
Bueno, en realidad coincido con el post completo. Y lo que aclaras va de la mano de "No hay lealtades". Obviamente cada uno va para donde cree que le conviene, dependiendo del momento.
Muy bien resumido...
Hay un concepto que falta, aunque me parece que está presente en la parte de “no hay partidos” y “no hay lealtades”: no hay propuestas ni idearios explícitos. Terminamos votando por Fulano/a, en la esperanza de que, si le toca ganar, en el momento de gobernar haga más o o menos lo que nosotros imaginamos que proponía, pero en realidad nunca nos lo dijo.
1er teorema menemista: Si hubiera dicho que haría lo que después hizo, no lo hubieran votado.
Ergo, no hay que decir lo que se va a hacer, no sea cosa que no te voten.
Eso lleva al personalismo: votás alguien ue te inspira confianza como persona, no un partido que tenga una plataforma y una ideología.
... lo que por supuesto está condenado al fracaso, porque no podés evaluar si alguien te inspira confianza o no basado solamente en el marketing que la plata puede comprar. Estamos fregados, mal.
Meh, yo sospecho que es una tendencia autocorregible. No es la primera vez que pasa, ni el primer lugar en el que pasa.
Para analizar politica sos un gran programador. Te faltó "son todo' una manga de chorros" para completar las diez verdades de peluqueria.
Fuera de broma, creo que el problema es que son una serie de reducciones, algunas las podría compartir, otras no y otras son empíricamente incorrectas (ya que reducciones). Pero finalmente lo que no comparto (supongo que en el fondo vos tampoco) es que la politica sea simple, la politica es tan compleja como la naturaleza humana.
Tal vez por eso algunos nos refugiamos en la calidez de las ciencias duras (programación) etc, que nos protege de la incertidumbre de las subjetividades que tanto incomodan.
Hay que agachar la cabeza y aceptar la triste noticia de que no se puede describir el mundo a través de un algoritmo.
La política está llena de gente simple.
Porque el mundo está lleno de gente simple, pero en alguna acepción, no creo que exista la gente simple en general.
Lo que escribí no apunta a simplificar a los políticos. Apunta a que hay que tratarlos como lo que son, que es gente. Los seres humanos somos bastante buenos en la tarea de estimar qué va a hacer otro ser humano.
Fijate que la mitad de lo que escribo es "no hay X". Es sacar cosas, para simplificar, porque son cosas que no existen. Uno puede pensar que un politico haría algo pero se contiene por una lealtad partidaria. Bueno, no hay lealtades partidarias, así que pronosticar se vuelve más sencillo.
Después hay un par de observaciones obvias, que todas las figuras políticas de algún éxito surgidas en los últimos quince años tienen guita. Y que son prepotentes.
Son obviedades, pero son obviedades que a veces (me parece, que se yo) no se ven porque las tapa el discurso. Pero el discurso en sí es vender humo, es más fácil entender la política si no escuchás lo que te dicen los políticos y mirás que *hacen* los políticos.
Pero sí, ponéle que es un post en un blog y no un tratado de teoría de la militancia.
Ehh, entiendo pero no comparto, sería largo de argumentar y supongo que no es el lugar. Pero es tu culpa, yo entré para ver tu charla de Python! Ahora me voy a opinar de química por algunos blogs políticos.