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Ralsina.Me — El sitio web de Roberto Alsina

Creo que hay un problema

El nom­bre es me­dio ra­ro (un por­tal pa­ra mi­co­s? Un port ál­mi­co? ni idea), pe­ro que miérco­le­s, des­pués de unir­me al gru­po fa­ce­book que me su­ge­rían, pos­tear en su mu­ro que man­dan spam y sali­r, em­pe­cé a pen­sar...

¿E­xac­ta­men­te qué me mo­les­ta de es­ta gen­te? Y de­ci­dí en­trar a su por­tal y ver que ha­bía cru­zan­do las puer­ta­s.

Apa­ren­te­men­te le es­tán dan­do mu­cha ma­ni­ja a 2012. Sin em­bar­go no es­pe­ran el fin del mun­do sino un "des­per­tar cós­mi­co" y di­cen que es­te even­to es "im­por­tan­te pa­ra to­da la ga­la­xia". Es­to pa­re­ce ser por una pe­cu­lia­ri­dad del ca­len­da­rio ma­ya. Guau. Y yo pen­sa­ba que los de Sto­p, unix ti­me! es­ta­ban exa­ge­ran­do!

Me tien­ta pre­gun­ta­r, si los ma­yas eran tan asom­bro­so­s, co­mo es que su ci­vi­li­za­ción era se­me­jan­te de­sas­tre? [1]

Pe­ro el pro­ble­ma no es ése. Éso no es lo que me mo­les­ta. La ado­ra­ción bo­vi­na de po­bre gen­te que hi­zo lo me­jor que pu­do pa­ra pa­sar sus vi­das ha­ce 600 años no es al­go tan te­rri­ble, (tam­po­co es lo mas as­tu­to de la tie­rra). Lo que me mo­les­ta es la cre­du­li­da­d.

Vea­mo­s...

Es di­fí­cil en­con­trar un post en el si­tio que ten­ga me­nos de 8 pun­tos en una es­ca­la del 1 al 10, pa­re­ce que to­dos es­tán más o me­nos de acuer­do en que es­tas co­sas exis­ten o son ver­da­d.

De he­cho las úni­cas co­sas que se me ocu­rren que na­die ahí pa­re­ce creer es men­sa­jes ocul­tos en la To­rah y pie gran­de, pe­ro ca­paz que no bus­qué bien.

Así que aho­ra creo que sé que me mo­les­ta. La fal­ta de gus­to. Si creés to­do, no creés en na­da en par­ti­cu­la­r. Si acep­tás to­do, no es­tás bus­can­do la ver­da­d. Si to­do es lo mis­mo, na­da es es­pe­cia­l.

La perspec­ti­va de un mun­do don­de to­do pue­de ser ver­da­d, to­do va­le lo mis­mo, to­do es lo mis­mo me re­sul­ta ... des­es­pe­ra­da.

Es­ta gen­te sue­na des­es­pe­ra­da. Sue­nan per­di­dos en el ma­r, tra­tan­do de afe­rrar­se a ca­da ra­mi­ta que pa­sa, sea un cris­ta­l, un con­ti­nen­te hun­di­do o un char­la­tán.

Que­ri­dos ami­gos de por­tal­mi­co: la úni­ca co­sa que ha­ce que la vi­da val­ga ser vi­vi­da es la gen­te. Sí, gen­te. No dio­s, no una pro­fe­cía ma­ya, no un án­ge­l. La gen­te.

Sal­gan. Co­noz­can a al­guien, ten­gan una lin­da vi­da. Lo que pa­se des­pués de eso, si es que pa­sa al­go, va a ocu­rrir igua­l. Sean bue­nos con la gen­te, y con­fíen que dio­s, (si exis­te) va­le al­go, y les va a dar la bien­ve­ni­da a un lin­do ran­cho, por­que si no­... si no no va­le la pe­na ado­rar­lo, que tan­to.

Me pa­re­ce que sal­go de es­ta zam­bu­lli­da en el sin­sen­ti­do con mi men­te más cla­ra, aun­que un po­co más tris­te. Sí son spa­m­mer­s. Sí, creen cual­quier co­sa. Oja­lá se me­jo­ren.

Nuevo look del blog!

To­da­vía no es­tá to­do mi­gra­do, pe­ro la ma­yor par­te de las pá­gi­nas de­be­rían ver­se mu­cho me­jo­r.

Cam­bié la li­cen­cia de to­do el con­te­ni­do ori­gi­nal a un Crea­ti­ve Co­m­mons (no co­mer­cia­l, sha­re-a­like, vean el li­nk a la iz­quier­da).

Ade­má­s, me­nos avi­so­s, y un nue­vo bo­tón "Do­na­te" pa­ra man­dar­me di­ne­ro que re­co­mien­do usen mu­cho y se­gui­do!

Ah, y de aho­ra en más pien­so pos­tear en es­pa­ñol to­dos los pos­ts cor­to­s, es­pe­ro que tam­bién las "his­to­ria­s" lar­ga­s, pe­ro eso es más di­fí­ci­l.


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